Son un objetivo muy apetecible para los ciberdelincuentes ya que los pueden usar como caballo de troya para introducir software espía y malware diverso en el entorno familiar.
Un nuevo informe del Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST) sobre la ciberseguridad de los datos genómicos encontró importantes brechas de privacidad en la forma en que se generan, almacenan y comparten los datos.
La compañía no respondió a las solicitudes de comentarios sobre si se trata de un ataque de ransomware, pero escribió en un sitio web temporal que ha desconectado ciertos sistemas y está "trabajando para volver a las operaciones comerciales normales lo antes posible".
Esta vulnerabilidad, identificada como CVE-2023-7024, afecta a las versiones de escritorio del navegador en Mac, Linux y Windows.